Si hubieran escrito el tiempo agregado del Atlético de Madrid-Porto, no habría salido así de cardíaco e imprevisible. Los Colchoneros recibieron al equipo portugués en el Metropolitano para iniciar la actividad del Sector B de la UEFA Champions League 2022-23.
Fuera de toda lógica, sometido como había estado Atlético de Madrid durante casi todo el partido y salvado por Jan Oblak, Antoine Griezmann surgió en la última jugada del duelo para rematar la victoria agónica de su equipo allá por el minuto 90+11. El local se levantó ganador de la ruleta rusa a la que se jugó en los instantes finales.
Condenado a la última media hora en cada partido, en una estrategia más que discutible en lo deportivo, por los 40 millones que deberá pagar Atlético a Barcelona si juega al menos 45 minutos en el 50 por ciento de los encuentros disponible entre la pasada y la actual campaña, asomó el internacional francés para ser tan decisivo como hace tiempo no le se recuerda, para dar un triunfo que nadie intuía en el Metropolitano y que disimula todas las incesantes dudas que demostró el conjunto rojiblanco.
Hasta entonces, Oblak, duda toda la semana por una contusión severa en el muslo izquierdo, había sido la única certeza en la igualada sin goles, a nada por parte del conjunto rojiblanco, por la que transitó el equipo madrileño hasta el tiempo añadido, hasta un final que apela a la épica y a la locura de un conjunto que fue difícil de comprender durante la hora y media de fútbol anterior.
La expulsión de Mehdi Taremi al minuto 81′ comenzó todo este final de locura. Vio la segunda tarjeta amarilla luego de simular una falta, poniendo en graves problemas al Porto en la recta final del partido. El Atleti se volcó al frente para aprovechar la ventaja numérica y llegó el gol que hizo explotar la grada colchonera.
Los del Cholo Simeone construyeron una gran jugada. Ángel Correa pasó el balón a Mario Hermoso, quien se quitó de encima a Bruno Costa con un amague, y su tiro, con fortuna, rebotó en Joao mario; esto techó a Diogo Costa, quien el tiro lo tomó en salida, y no pudo hacer nada para evitar el 1-0 al 90+1′.
Parecía que el Atleti lo ganaría sin problema. Pero la mano del mismo Mario Hermoso dentro del área le puso drama a los nueve minutos agregados. Fue Mateus Uribe el encargado de patear, con nervios de acero, desde los once pasos; un tiro que detuvo el corazón de la afición porque Oblak manoteó la pelota, que se alcanzó a colar lentamente a la red al 90+6′. 1-1 inminente. El Cholo pedía concentración. Y los rojiblancos luchan hasta el final siempre.
Antoine Griezmann, como se mencionó, destinado a jugar poco, se puso la capa de héroe. Axel Witsel prolongó un tiro de esquina para la llegada en solitario del francés a segundo poste; Griezmann metió la cabeza para anotar al 90+11′, en una acción en lo que nada pudo hacer Pepe. Todos corrieron a la esquina para celebrar, incluso Simeone, quien le gritó de todo a uno de los mejores jugadores que dirigido.
Atlético de Madrid se puso líder del Grupo B gracias a este triunfo in-extremis. Se puso adelante del Club Brujas (3), en un sector en el que Porto y Bayer Leverkusen se quedaron sin sumar. Los Colchoneros intentarán mejorar su paso en La Liga cuando reciban al Celta de Vigo este sábado. Después regresarán a la Liga de Campeones para visitar al conjunto alemán.

