Berlín, Alemania (09 de Julio de 2006). Italia y Francia disputaron la Final de la Copa del Mundo en el Estadio Olímpico. Dos de las selecciones más importantes, dos potencias europeas en la última instancia del partido más importante de todos, algo que no sucedía desde 1982.

Italia superó el Sector E de la Fase de Grupos como primer lugar con 7 puntos: derrotó a Ghana y República Checa mientras que contra Estados Unidos solo obtuvo un punto. En Octavos de Final superó a Australia por un gol a cero y pasó de Cuartos de Final metiendo tres dianas ante Ucrania. En las semifinales venció al anfitrión, Alemania, por dos-cero y así llegó a la final. La defensa conformada por Fabio Cannavaro, Marco Materazzi, Gianluca Zambrotta y Fabio Grosso solo permitió 1 GOL antes del partido decisivo: el catenaccio en su máxima expresión.

Por otro lado está Francia quien superó la primera fase como segundo lugar del Grupo G. Debutaron con empate ante Suiza, volvieron a empatar ante Corea del Sur y en el último partido, el triunfo sobre Togo y la victoria de Suiza sobre el país asiático le permitió avanzar a la siguiente ronda. En Octavos de Final eliminaron a España en Hanóver. Zinedine Zidane dio un recital ante la Brasil de Dida, Cafú, Roberto Carlos, Juninho, Kaká, Ronaldo y Ronaldinho en Cuartos de Final. Y en semifinales vencieron por la mínima a Portugal en Múnich.

La gran final, plagada de estrellas, dio cita a estas dos grandes selecciones. Italia, favorita, por supuesto, por el gran torneo que hizo. Pero no se podían confiar ante la Francia que fue de menos a más que contaba entre sus líneas con un Mago Zidane en modo superlativo y motivado por su último partido como jugador profesional.

Italia campeón y el último juego de Zidane.

Marcello Lippi alineó en la Final de Alemania 2006 a jugadores como el Balón de Oro, Fabio Cannavaro. Gennaro Gattuso, Andrea Pirlo (el MVP de la final) y Mauro Camoranesi. Con Francesco Totti por detrás del gran Luca Toni. Y Raymond Domenech paró desde el inicio a tipos como Lilian Thuram, Éric Abidal, Patrick Vieira, Franck Ribéry y Thierry Henry como gran goleador.

El partido tuvo de todo, como un penal a los 7′ que Zinedine Zidane ejecutó de manera magistral a lo Panenka, a pesar de tener a Gianluigi Buffon en el arco. Pero eso no detuvo a los italianos que empataron a los 18′ con gol de Marco Materazzi.

El empate nos llevó hasta tiempos extra para regalarnos una de las estampas más épicas de toda la historia: la expulsión de Zinedine Zidane por un cabezazo en el pecho sobre Marco Materazzi. «Es un gesto que no se debe hacer, lo digo fuerte y claro. Pero Materazzi dijo cosas muy personales sobre mi madre y mi hermana; palabras muy duras y que repitió muchas veces llegando a lo más profundo de mí. Hubiera preferido recibir un golpe en la boca que escuchar eso. Pido perdón. Pero no puedo arrepentirme de mi gesto porque eso querría decir que él tendría razón de decirme lo que me dijo», declaró el francés días después del suceso en entrevista para Canal+.

La definición por penales fue necesaria e Italia no falló ninguno. Andrea Pirlo, Materazzi, Daniele de Rossi, Alessandro Del Piero y Fabio Grosso marcó el penal decisivo. A los italianos les ganaron la tanda 5-3 debido al fallo de David Trezeguet en su ejecución desde los once pasos.

Crisis post campeonato del mundo.

Después de aquella generación legendaria, Italia se desvaneció. En Sudáfrica 2010 quedó última del Grupo F -que compartió con Paraguay, Eslovaquia y Nueva Zelanda- al sumar solo dos puntos. En Brasil 2014 se volvió a quedar en la Fase de Grupos ya que solo fueron capaces de vencer a Inglaterra dentro del Sector D, que completaban Costa Rica y Uruguay.

Pero si eso parecía grave, en realidad no habíamos visto nada. La ausencia de una gran estrella, un cambio generacional lento y ausencias clave en el partido que daba la clasificación para Rusia 2018, fueron los factores que intervinieron para quedarse fuera de la justa mundialista de hace cuatro años.

Cuando parecía que la solución había llegado gracias que vencieron a Inglaterra por el trofeo de la UEFA EURO 2020, volvieron a caer. Italia perdió ante Macedonia del Norte en el Stadio Renzo Barbera por un gol de último minuto. Aleksandar Trajkovski los dejó fuera en el repechaje de las Eliminatorias de la UEFA y sin la posibilidad de competir en Qatar 2022.

Así han pasado 16 años desde aquella conquista mundial de Italia en Alemania. La próxima justa que inicia este año en noviembre también la tendrán que ver como cualquier aficionado más. Mientras tanto, deberán planear cómo no volver a perder un Mundial para tratar de estar presentes en la siguiente copa, que organizan México, Estados Unidos y Canadá, para 2026.