El Campeón del Mundo inicio sin maldición alguna. Francia tuvo un terrible inicio y fue golpeada apenas a los diez minutos pero supo retomar el camino para demostrar que continua tan fuerte como hace cuatro años; La respuesta llegó rápida y sin piedad remontando el partido 4-1 ante Australia.

Con un gol a favor y una lesión de la selección rival, Australia confiaba en que podía hacer un Arabia Saudita para sorprender al mundo. La ventaja les duro poco porque Adrien Rabiot le dio el respiro que Francia necesitaba.

Tras la caída del gol en contra, el panorama de Francia se complicaba cuando Lucas Hernández acudió al corte sufriendo una lesión en la rodilla derecha y fue remplazado por Theo.

Al 32′ Rabiot orquestó la remontada coronando a Giroud quien solo tuvo que empujar la pelota ante una defensa australiana desaparecida.

Al segundo tiempo Francia selló la victoria al minuto 68′ cuando Kylian Mbappé puso el tercer tanto del encuentro tras rematar un precioso centro de Dembélé. Una vez más Giroud apareció para cerrar la noche de manera mágica igualando la cantidad de goles máxima de Thierry Henry al anotar el cuarto y último del partido con un cabezazo fulminando a la Selección de Australia.

Nada que reprochar a Australia, dando una buena exhibición ante el gigante Frances que viene fuerte para defender su corona ante el que se le ponga enfrente.

Francia se queda con la primera posición del Grupo D, con Tunisia y Dinamarca justo debajo y Australia en la última posición tras la derrota.