Wolverhampton recibió a Manchester City en Molineux Stadium para reanudar las acciones de la Premier League con la jornada ocho. El fútbol inglés suspendió actividades el pasado fin de semana como muestra de respeto ante el fallecimiento de la Reina Isabel II. Pero desde este lunes, de a poco, volvieron las actividades en la medida de lo posible, pues actos de luto se siguen desarrollando en el país.
Jack Grealish por fin pudo arrancar la temporada luego de superar una lesión. Ante las dudas de muchos seguidores, de la prensa y de un entorno que exige que demuestre su mejor versión, sobre todo por lo que costó y para justificar su convocatoria a la selección, el 10 de «los ciudadanos» respondió con un gol antes del minuto de juego. Kevin De Bruyne abrió el juego desde el centro para Phil Foden, este le devolvió de tacón, el belga metió un centro para la llegada de Grealish y el local ya lo perdía a los 55 segundos de juego.
Para «Los Lobos» sería difícil llegar a la portería del Bicampeón de Premier League. Aunque en construcción podían hacer algo gracias a la presencia de tipos como Rúben Neves, Joao Moutinho, Pedro Neto y Daniel Podence, les estaba haciendo falta encontrar a alguien en el área que pudiera terminar las jugadas de peligro. Diego Costa fue anunciado como nueva incorporación, pero todavía no pudo ser opción y Raúl Jiménez se encuentra lesionado. Por eso, cualquier chance de superar a Manuel Akanji-Rúben Dias, debía ser aprovechada.
También era importante para los Wolves mantener el orden defensivo mostrado hasta el momento, pero con la presencia de Erling Haaland, hasta la mejor muralla es derribada. El noruego no deja de anotar y tomó a Max Kilman corriendo contra su arco para sacar un tiro con la derecha, que no fue el mejor, pero que fue suficiente para vencer a José Sá al 19′. Son 11 goles para El Androide en esta Premier; 14 goles en 10 partidos con el Manchester City en lo que va de temporada. Una auténtica locura.
Con dos goles encajados, el partido ya era difícil para «The Wanderers», pero Nathan Collins se encargó de complicarlos todavía más. El defensor disputó un balón con Grealish cerca de la línea de banda y lo terminó pateando cerca de la zona del abdomen. El árbitro no dudó en mostrar la tarjeta roja al número 4 luego de esa jugada tan peligrosa. Perdiendo y con uno menos, así terminó el local el primer tiempo.
«Los ciudadanos» manejaron la ventaja en la segunda mitad con cautela para no emplearse a fondo y sentenciaron el juego con un gol más. Haaland recibió en el área, aunque le tocó retroceder ante la marca; el noruego aguantó muy bien el balón, lo pisó y tocó en profundidad para De Bruyne. El belga, de primer intención, mandó un servicio que remató Phil Foden al 69′ para el 0-3 final.
Wolverhampton volvió a perder esta temporada y apenas suma 6 puntos en el torneo. Su próximo encuentro será el sábado 01 de octubre contra el West Ham, en el Estadio Olímpico de Londres.
Manchester City, por otra parte, dormirá como líder de la Premier League con 17 unidades; a la espera de lo que haga el Arsenal el día de mañana en Brentford. Los dirigidos por Pep Guardiola volverán a reaundar acciones tras el parón de selecciones con un lindo partido: enfrentan a Manchester United en el Derbi el próximo 02 de octubre.
